26 de octubre de 2023

Bordeando derrumbes de rocas y árboles que tapaban el camino, cambiando de automóviles o caminando sobre el barro, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador completó finalmente el trayecto hasta el puerto de Acapulco, en la costa mexicana del Pacífico, incomunicado y devastado por el embate del huracán Otis, fenómeno meteorológico que tocó tierra pasada la medianoche del 25 de octubre. Antes de llegar por la tarde del miércoles al puerto, el mandatario y su equipo se toparon con derrumbes que bloqueaban las dos carreteras principales que llevan a Acapulco, a casi 400 km de Ciudad de México, donde evaluará los daños provocados por el ciclón. Sin telecomunicaciones en la zona, la gobernadora del estado de Guerrero, Evelyn Salgado, dijo en la red social X (antes Twitter) que su administración trabaja para la reapertura de las carreteras y las líneas de telefonía, en lo que llamó un «inédito escenario» del que aun no se conocen mayores precisiones.