7 de octubre de 2015
Se presentó públicamente en la Sala Jacobo Laks del Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini la línea de investigación «Políticas estéticas» del Programa Sur Global de la Universidad Nacional San Martín (UNSAM). Florencia Abbate, escritora y responsable del proyecto, y Juan Obarrio, director del Programa, conversaron en ese marco con el crítico brasileño Idelber Avelar, autor del libro Alegorías de la derrota, quién analizó la relación actual entre cultura y política. Abbate celebró la presencia de Avelar en el marco del lanzamiento y resaltó además el interés por la obra del profesor de Literaturas Latinoamericanas y Teoría Literaria en la Universidad Tulane, en Nueva Orleans. «Su pensamiento no supone perder la sensibilidad de acercarse a las obras como objetos estéticos y tratarlos como tales. Por su otro perfil de crítico cultural –dijo la escritora–, interviene en la coyuntura política de su país desde un lugar masivo, más popular, que también es un cruce raro porque nos hemos acostumbrado a que el discurso académico circule por otro lado».
A su turno, Avelar, que habló sobre la experiencia de las posdictaduras y las relaciones actuales entre cultura y política en Argentina, Brasil y Chile, repasó el contexto de producción de Alegorías de la derrota. «El libro se adentra en los debates de esos tres países de maneras muy distintas, analiza las filigranas de textos literarios que me parecieron representativos en ese momento –apuntó su autor–. Las dictaduras interrumpen la posibilidad de la redención por las letras al tecnificar el cuerpo social, al rendirlo al mercado, al hacer reformas universitarias», agregó. Avelar indicó además que una de las provocaciones con las que se inicia el libro es la historia de la derrota de los gobiernos populares que termina el 11 de setiembre de 1973, con el bombardeo a La Moneda. «Con la caída de Salvador Allende podemos pensar que está iniciada la “transición”, término que uso de manera diferente al que lo usan las Ciencias Sociales en nuestros países», explicó Avelar sobre las premisas del libro.