24 de mayo de 2022
Se detectó en el país el primer caso sospechoso de la enfermedad, que ya registra brotes en Europa y América del Norte. Formas de transmisión y cuidados.
República Centroafricana. Un profesional de Médicos sin Fronteras examina a un niño durante el brote que se extendió por la región en 2018.
BOUESSEL/AFP/DACHARY
La viruela símica o viruela del mono es una enfermedad considerada «rara» por la Organización Mundial de la Salud, que se da principalmente en zonas de África central y occidental y que en 2003 se detectó por primera vez fuera del continente Africano, en Estados Unidos. Es provocada por un virus (el orthopoxvirus) que se transmite a seres humanos por distintos animales salvajes como roedores y primates, con una propagación limitada entre personas.
Esta zoonosis viral que aparece en forma esporádica desde la erradicación de la viruela en 1980 hoy es noticia en el país por la aparición del primer caso sospechoso: se trata de un paciente que estuvo en España y regresó a la Argentina hace una semana. En tanto, Europa y América del Norte asisten a la irrupción de un brote epidémico.
«Es un virus que surgió en África y están apareciendo casos en países de Europa, Estados Unidos y Canadá, y si bien los primeros casos del Reino Unido estuvieron asociados a pacientes con antecedentes de viaje a Nigeria, se empezaron a observar casos sin antecedentes viajeros, por lo que se cree que hay transmisión comunitaria allá», señala Virginia Angeletti, coordinadora de la Comisión de Emergentes y Enfermedades Endémicas, de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
La viruela del mono hoy está en la categoría 3 de clasificación del Comité Asesor de Patógenos Peligrosos de Reino Unido, esto significa, según ese organismo, que «puede causar enfermedades humanas graves, ser un peligro y puede diseminarse a la comunidad, pero por lo general existe una profilaxis o tratamiento eficaz disponible».
En diálogo con Acción, Angeletti adelanta que desde la SADI están «revisando la información, porque es nueva para todos» y resalta que ya salió un documento con información general para la comunidad –que se puede consultar en la web de la sociedad científica– y pronto saldrá otro para los profesionales de la salud. «Más que nada para poner al tanto a la población sobre qué es, cómo se contagia, cómo prevenirla y cuándo consultar», agrega.
Cara, manos y pies
La médica infectóloga explica que «el contagio es por contacto estrecho y prolongado tanto por las gotitas de saliva como por contacto de la piel lastimada o las mucosas con lesiones, que es la principal manifestación clínica».
La enfermedad aparece con un cuadro inespecífico con fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, aparición de ganglios, y después de cinco días se aprecian las manifestaciones más características, que son las lesiones en piel similares a las de la varicela, o antiguamente a la viruela, una ampolla con pus que termina en una costra. Lo más característico de este virus es la aparición en cara, manos y pies.
«Es una enfermedad que se autolimita, cursa una evolución de aproximadamente dos semanas y pasa», subraya la especialista y advierte que el primer contagio es a través del contacto con animales infectados, la transmisión de persona a persona es poco frecuente y por eso «resultan llamativos todos estos casos».
«Está todo en estudio, en observación», insiste Angeletti y advierte que aún no hay alerta sanitaria en el país». «No hay que alarmarse, es bueno tener conocimiento sobre casos compatibles y poder emitir la alerta en forma temprana para frenar la transmisión», concluye.
Hasta ahora se han registrado casos en Australia, Gran Bretaña, Portugal, Alemania, Estados Unidos, Canadá, Italia, Suecia y España, este último país con un mayor número de infectados. Aunque no existe ninguna vacuna específica aprobada en Europa contra la viruela del mono, España ya se prepara para la compra de miles de vacunas contra la viruela tradicional para hacer frente a este brote.