26 de enero de 2016
Producto del avance del brote de dengue, hacia fines de enero se registraban más de 1.100 casos en todo el país. El virus, transmitido por el mosquito Aedes aegypti, fue caracterizado como epidémico en Formosa y Misiones. En esta última provincia existen casi 900 casos sospechosos y 36 confirmados, lo que obligó a las autoridades sanitarias a declarar la emergencia epidemiológica ante el avance del virus. En otras provincias, como Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, la presencia creciente de casos autóctonos –es decir, no contraídos por viajeros en Paraguay y Brasil, donde la enfermedad hace estragos– hasta entonces escasos, alarma a las autoridades. En el Conurbano bonaerense hubo seis casos autóctonos y se espera confirmación sobre otros dos pacientes, sospechados de haber contraído el virus. Para el ministro de Salud de la Nación, Jorge Lemus, «estamos en una situación preocupante porque hay una importante epidemia en los países vecinos, en una zona que abarca el este de Paraguay y los estados brasileños de Paraná y Matto Grosso». Por otra parte, Lemus convocó a la población a extremar cuidados para impedir «en familia» la proliferación del mosquito vector de la enfermedad y agregó que su cartera releva todos los días nuevos datos de las provincias mediante el sistema de vigilancia epidemiológica.