26 de abril de 2019
Los antiguos equipos de impresión que la tecnología digital había casi desechado volvieron a ponerse en marcha. En distintas ciudades del país, las nuevas imprentas artesanales salieron al rescate de los viejos oficios gráficos, como tipógrafos, impresores, grabadores, encuadernadores y fabricantes de papel artesanal, que conforman un panorama alternativo al diseño producido mediante pantallas y dispositivos digitales. Siguiendo los pasos de las private press fundadas por William Morris a fines del siglo XIX, los nuevos talleres artesanales se abocan a la impresión de libros de colección, afiches y tarjetas. La Imprenta Ideal, de Patricio Gatti, y el taller de Rodrigo Cuberas, dan cuenta de una tendencia que crece y gana adeptos entre diseñadores y editores que valoran la calidez y el interés por los detalles que brinda el trabajo artesanal de estos nuevos maestros impresores.
