27 de mayo de 2015
Jugadores argentinos vienen ganando terreno en el circuito profesional de mayores, y se perfilan como sucesores de figuras que dejaron una huella en la disciplina.
El golf, disciplina con tradición en la Argentina, tuvo grandes campeones a lo largo de los años. Roberto de Vicenzo fue, quizás, el nombre más emblemático dentro del país, a partir de sus logros deportivos en el extranjero, principalmente en la década de 1960, cuando logró 7 torneos en total, entre ellos el Abierto Británico de 1967, una de las cuatro competiciones más importantes que se disputan todos los años.
Tras el retiro de De Vicenzo, el golf argentino sufrió la ausencia de éxitos internacionales, hasta que apareció Ángel Cabrera en la década de los 90 y principalmente en el nuevo siglo. El cordobés se codea con la elite mundial desde hace años, y llegó incluso a ganar dos Majors (US Open 2007 y Masters de Augusta 2009), los torneos más relevantes de la disciplina. Cabrera acredita 5 títulos en el circuito PGA, el más eminente del mundo, y más de 20 campeonatos a nivel latinoamericano y nacional.
Crecer de golpe
Históricamente, el golf fue un deporte en el que los jugadores alcanzaban su mayor nivel pasados los 30 años, ya con la experiencia de varias temporadas en el circuito. Desde hace algunos años, y se podría marcar como punto de inflexión la aparición de Tiger Woods –para muchos uno de los mejores jugadores de la historia–, los golfistas de elite aparecen cada vez más jóvenes.
Siguiendo los pasos del Pato Cabrera, varios golfistas argentinos ya asoman entre los mejores del deporte a nivel mundial. Si bien aún no han ganado torneos de primer nivel, tanto Tomás Cocha (24 años), como Emiliano Grillo (22), ya se mezclan con las figuras en los torneos más importantes.
Cocha, nacido en Salta el 26 de abril de 1991, cuenta en sus vitrinas con tres títulos del PGA Tour Latinoamericano: el Mundo Maya Open de 2012 y dos campeonatos logrados de manera consecutiva al comienzo de la actual temporada, el Mazatlán Open de México en marzo y el Abierto del Centro en abril, disputado en la Argentina y en el cual Tommy se consagró por delante del propio Ángel Cabrera.
Gracias a estos dos títulos, Cocha lidera el ránking de la Orden del Mérito del circuito latinoamericano, que entrega al final de la temporada 5 plazas para competir en el prestigioso Web.Com Tour, donde se presentan los mejores golfistas del mundo.
Grillo, por su parte, ganó el Visa Open de Argentina en 2014. Con apenas 22 años, el chaqueño está desarrollando su carrera en el tour europeo y ya está asentado entre los 100 mejores jugadores del mundo: hoy figura en el puesto 85, y viene escalando posiciones en los últimos meses.
Surgido de la escuela de desarrollo de la Asociación Argentina de Golf, Grillo es un caso típico de la nueva camada de jóvenes profesionales del golf. A los 5 años ya despuntaba el vicio acompañando a su padre, que jugaba en el Chaco Golf Club. Allí creció, entre hoyos, putters y una leyenda local que lo inspiró: José Cóceres, chaqueño que disputaba los torneos más importantes del golf a nivel mundial, le dio el empujón anímico que faltaba. «Me ayudó a soñar. Saber que alguien del Chaco estuvo ahí, en la elite, y que se puede llegar», señaló Grillo tras haberse consagrado en el Visa Open de Argentina el año pasado.
El chaqueño emigró cuando tenía 15 años a Florida, Estados Unidos, para pulir su juego en la academia de David Ledbetter, una de las más prestigiosas del mundo. Afincado gran parte del año en Norteamérica y Europa, Grillo apunta alto y sigue el camino de muchos profesionales del Viejo Continente y EE.UU., algo no tan común para golfistas latinos.
Aunque con un poco más de rodaje que sus compatriotas Cocha y Grillo, Estanislao Goya es otro argentino de la nueva camada que brilla en el circuito mundial. El cordobés, de 26 años, ya tiene 6 títulos en su palmarés, el último en Sudáfrica en 2014. El nacido en Alta Gracia aún busca insertarse de lleno en el circuito PGA, el más exigente. Mientras, Goya compite en Europa y Asia, donde viene consechando buenos resultados a pesar de que no consigue un título hace más de un año.
Argentina se ubica hoy en los primeros planos de la especialidad, lugar al que se arribó en los últimos años gracias a los meritorios desempeños del Pato Cabrera. Estos jóvenes, que vienen sobresaliendo en distintos torneos, reúnen condiciones suficientes para continuar la senda exitosa, reafirmando la rica historia deportiva argentina en la disciplina.
—Germán Esmerado