18 de abril de 2023
Cuarenta y ocho empleados de planta fueron cesanteados sin previo aviso y de modo intempestivo. Trasfondo político de una nueva embestida en el gremio.
En lucha. Movilización por la reincorporación de los trabajadores frente a la puerta de Clarín.
Foto: Sipreba
El diario Clarín despidió este domingo a 48 trabajadores en forma injustificada y sin previo aviso. Si bien el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, la cual intima a reincorporar a los trabajadores y suspende el paro de actividades anunciado por el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), la empresa recién acató dicha disposición este martes. El lunes no envió representantes a la audiencia manteniendo los despidos.
De esta manera, se abre una instancia de diálogo entre el sindicato y la empresa. Asimismo, se espera la constatación de la reversión de los despidos, ya que hasta el lunes al menos, los y las trabajadoras cesanteadas no habían podido ingresar a la redacción de la calle Tacuarí.
Sobre los motivos de los despidos, la empresa AGEA S.A. (dueña de Clarín), se justificó mediante un comunicado aduciendo la decisión a una adaptación de «la organización interna a una nueva realidad de la industria» haciendo referencia a la reconversión digital. Sin embargo, la explicación genera dudas ya que tres de los despedidos pertenecían al área de redes sociales y otros dos a sistemas.
Oscar Bernarde, redactor de deportes y delegado gremial, desestimó los argumentos patronales y explicó: «Se trata de una marcada de cancha al SiPreBA que acaba de conseguir la personería gremial para poder estar en las paritarias que se vienen en un contexto de una gran precariedad laboral y en un año de elecciones».
Por otra parte, además de los 48 empleados estables echados de la redacción –entre ellos periodistas, fotógrafos, diseñadores y diagramadores– se busca establecer si existen más despidos al haberse cerrado también recientemente la revista Pyme donde se desempeñaban colaboradores contratados.
Misma metodología
Sobre la forma de las desvinculaciones, un domingo y por correo electrónico, Bernarde aseguró que «sin dudas no fue casual», y que buscó evitar la reacción de los trabajadores ya que «en general es una redacción muy vacía los domingos y lunes» debido a los francos. Además, calificó como «cínica» la fecha de la medida al cumplirse el lunes 17 cuatro años de los 65 despidos de 2019 y recordó cómo esas formas despersonalizadas de actuar son algo habitual en el grupo Clarín: «Es el protocolo “A-inhumano”, no tienen un protocolo «B-humano». En el año 2000 mandaron 115 cartas documento. Un sábado a las 8 de la mañana. En el 2019 mandaron mails, cortaron sistema y vallaron con policías la puerta del diario. La metodología siempre es esa. Imaginate lo que es para una persona que trabajó 20 años en un mismo lugar: de un día para el otro no podés entrar».
Además, entre las causas detrás de estas desvinculaciones no se descarta un mensaje político luego de que la Justicia fallara recientemente a favor de Alberto Romero, trabajador de la planta gráfica de la calle Zepita perteneciente al Grupo, que fue despedido sin causa luego de que fuera elegido para ejercer como miembro de la Junta Electoral en la votación de Comisión Interna del sindicato, en agosto de 2018. Después de un extenso litigio, la Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo declaró nulo el despido estableciendo «un móvil discriminatorio por las actividades gremiales», según el fallo.