5 de enero de 2022

El presidente francés, Emmanuel Macron, abogó por la postura agresiva de Europa contra los no vacunados, señalando que quiere «fastidiar» a las personas que no se vacunan contra el COVID-19. «Vamos a seguir haciéndolo, hasta el final. Esa es la estrategia», dijo el mandatario en una entrevista con el diario Le Parisien, donde añadió que eso significa «limitar al máximo su acceso a las actividades de la vida social». Los dichos de Macron provocaron una airada respuesta de los políticos de la oposición en Francia, y llevaron al Parlamento a suspender un debate sobre nuevas restricciones por el virus. Un grupo de legisladores exigen que el primer ministro, Jean Castex, comparezca para explicar las declaraciones del primer mandatario. En varios países ya se están aplicando medidas selectivas, en las que se restringe el acceso a bares, restaurantes y otras actividades cotidianas a quienes no están vacunados.