25 de febrero de 2015
«Cuando empecé a escribir prosa aspiraba a que cada frase tuviera esa intensidad máxima. No creo haberlo conseguido, pero esa tensión, ese deseo, siempre está conmigo. Lo que busco, en todo caso, va cambiando siempre. Creo que cada libro mío nace del anterior, a veces literalmente –de un fragmento, de un pasaje–, pero que también está en contra del anterior.»