10 de mayo de 2017
Los lustrabotas de la ciudad de Salta hacen su tarea cotidiana en las calles de la capital provincial con cajones confeccionados por presos del penal de Villa Las Rosas. La iniciativa, destaca el diario El Tribuno, fue de Juan Pedro Toconás, un lustrabotas retirado al que popularmente se conoce como el Gorra Felipe. Los cajones tienen los colores del poncho salteño, rojo borravino con guardas negras, como era el viejo sueño de Toconás, y fueron donados por el gobierno local. El lustrabotas jubilado relató que venía haciendo el pedido ante las autoridades penitenciarias y políticas y que la entrega se vino demorando por cuestiones burocráticas, pero también por el femicidio en la cárcel de Andrea Neri.